Descripción
Cuando el boceto del León 14 me vio que cogía un boli Bic pensó que iba a escribir un relato sobre él para inspirarme en su dibujo.
Pero al ver que le clavaba la punta del bolígrafo en la pupila y la rellenaba de tinta azul se quedó sin rugidos. El pobre ignorante desconocía que el bolígrafo sirviera para tal fin. Aun así se dejó hacer, obviando la calidad del resultado de mi mano novata con dicha técnica.
El León 14 es único entre los únicos porque es el primero en llevar tinta de bolígrafo en sus poros, quien se lo quede tiene que apreciarlo. Si lo quieres para ti, ruge.